Dejando el futuro al destino.

Y simplemente darme cuenta de que eres tú, tú, tú y solo tú. Que eres quien buscaba. Y es que si el sino quería que estuviéramos juntos, ambos nos daremos cuenta desde la primera mirada, desde la primera sonrisa. Sin forzar nada, dejando que fluyan los sentimientos, la curiosidad y la atracción.